CASO HOSPITAL S.COSME Y S.DAMIÁN

¿Qué decir del hospital de San Cosme y San Damián?, antiguo manicomio de Sevilla, en cuyo solar, por lo visto, las herramientas salen solas de paseo para deseperación y acongojo de los albañiles. Quizás sea una travesura del loco Amaro; Sancho Roma que vuelve al lugar del que escapó por los tejados; delirio de un preso inquisitorial que para salir del castillo trianero fingió demencia y acabó allí ciertamente ido, o el alma en pena de Juana Benítez, a quien jamás le dieron con el desAyuno el chocolate que diariamente pagaba su familia. Cientos de espíritus, a cual más majareta, debieron salir de las entrañas de la tierra cuando las palas excavadoras removieron el subsuelo. Y es que a los espectros no le sientan bien las obras; veremos cuándo las palas excavadoras removieron el subsuelo. Y es que a los espectros no le sientan bien las obras; veremos cuándo le dé por levantarse a los del convento de la Encarnación.
Entre los fantasmas, los quinquis y los tiroteos a plena luz del día, el deleitarse calle San Luis abajo con los atardeceres veraniegos de nubes sonrosadas y procesión de últimos rayos por las azuladas tejas y tiras cerámicas de la cúpula jesuita va a ser motivo suficiente para que a uno le den la cruz al valor y el mérito estético, con distintivo blanco por aquello de las sábanas.