Diputación de Sevilla: Los fantasmas del viejo cementerio
Por JM Garcia y Rafa Cabello - (Mayo 2003)
Extraños sucesos e incidentes paranormales de tipo fantasmagórico en el edificio de la sede oficial de la Diputación de Sevilla.
Por JM Garcia y Rafa Cabello - (Mayo 2003)
Extraños sucesos e incidentes paranormales de tipo fantasmagórico en el edificio de la sede oficial de la Diputación de Sevilla.
En pleno centro de Sevilla se alza, majestuoso, uno de los edificios con más rancia tradición de la ciudad hispalense. Se trata del edificio de la Diputación de Sevilla, cede oficial de este organismo y antiguo Cuartel de la Puerta de la Carne. Su construcción se remonta al año 1785 y destinado a su utilización integra para alojamientos militares en el siglo XVIII, de estilo neoclásico y una de las primeras obras realizadas dentro de la visión arquitectónica “tardo-académica”. Dicho edificio sevillano es un fiel calco del proyecto original de la obra militar del Cuartel realizado por Juan Martín en el año de 1751 para la ciudad de Reus.
Las obras en firme comienzan sobre el año de 1785, un año de abundantes lluvias. Estos hechos conllevan grandes riadas en estos terrenos, ocasionando pérdidas constantes de materiales de construcción y un peligroso deterioro en las cimentaciones de esta casa cuartel, una petición de los altos mandos militares al ayuntamiento les concede buscar otro emplazamiento a escasos cien metros, este nuevo terreno (huertas baja y alta de espantaperros) en los planos urbanísticos de la época se establecían con la denominación geológica de “alturas de la ciudad”. Curiosamente estas formaciones en altura “a veces inexplicables sobre zonas llanas” conllevan en su interior cúmulos de enterramientos de determinadas religiones. ¿Casualidad?
Las medidas de la planta rectangular exterior son de (100m. fachada x 87m. fondo), el patio principal interior es de (60m x 40m). Su exterior está concebido simétricamente, las fachadas presentan una decoración de mampostería repetitiva entre ventanas y trozos de pared, la planta baja está realizada con grandes ventanales rectangulares cerrados de rejas de forjas, mientras la planta superior deja ver una serie de arcos rebajados, encima del portal de acceso existe un único balcón. Se pueden apreciar en algunos lugares de sus fachadas laterales reformas perdidas durante su larga vida, donde las ventanas han sido sustituidas por óculos para achicarlas y hacer las estancias más confortables. Perimetralmente todo el edificio queda coronado por una cornisa, sostén del antepecho de mampostería que remata toda la azotea de la cubierta superior del edificio.
Podemos deducir que la funcionalidad de este edificio está en consonancia con su destino, soluciones arquitectónicas para el alojamiento de gran cantidad de hombres (tropa), ganado (caballar), útiles bélicos (armamento), buena ventilación, espacios muy luminosos y los mayores avances de higiene de la época. Tal vez era una obra moderna , de sencilla fisonomía , novedosa y que rompía con estrépito la idea del monumentalismo sevillano, hoy tarjeta identificativa del cambio generalizado en otras muchas construcciones para fines parecidos a partir de esa época.
A mediados de los ochentas los jardines delanteros que ennoblecían al edificio, pasaron de ser un magnífico ejemplo de mantenimiento constante por parte de los soldados a un bosque desproporcionado de hierba , árboles y palmeras rotas, que en su caída arrastraron destrozando garitas, verjas, pilotes, paredes e incluso hasta la pequeña plazoleta de bancos y mesa central de cerámica sevillana. Este lamentable acontecimiento, la rotura de las palmeras, ocasionó un accidente mortal, en su caída encontró una familia que paseaba dejando en ese sitio sin vida al matrimonio y uno de sus hijos menores, curiosamente el soldado de la garita también falleció como consecuencia del enterramiento producido por los cascotes de la techumbre de dicha garita, esta representaba un pequeño castillo en el que solo cabía un soldado de guardia de puerta.
Desde ese preciso momento se comenzó a divulgar por Sevilla que ese edificio había mantenido en vilo durante los últimos años a muchos vecinos de la zona, diciendo estos apreciar movimientos de sombras, extrañas formaciones evanescentes , desgarradores gritos y alguna aparición espectral en los grandes salones que llevaban varios años totalmente vacíos y cerrados sin posibilidad de entrada ya que puertas y ventanas de los bajos todas habían sido tapiadas con ladrillos. Incluso antiguos soldados de servicio en el edificio, como Jesús S. , nos relataban: “ es curioso, aquel edificio encerraba algún misterios recóndito... Recuerdo que junto con un amigo de la mili nos poníamos a gritar canciones no muy nacionales y aquellos gritos no salían de la habitación... era como si nadie lo escuchara... ahogaba el sonido...siempre se dijo que en edificio se escuchaban cosas raras pero muchos pensaban que era la típica novatada de la mili...” Poco tiempo después se comenzaron desalojar las instalaciones de personal militar y el edificio de excelente planta neoclásica quedó semidesierto y abandonado...
Pero no nos traen a estas páginas ningún fin ni movimiento arquitectónico y si los extraños sucesos que han venido sucediéndose en este edificio desde que en el año 1994 se habilitara para su uso como edificio oficial de la Diputación de Sevilla.
Los sucesos comienzan cuando diferentes miembros del cuerpo de limpieza del edificio escuchan ,claramente, los llantos y quejidos de “alguien” en las cercanías del patio antiguo de cocheras donde hoy se alza un conjunto de edificios de nueva construcción. El suceso impactó profundamente a J. G. S. ,personal del edificio quién relataba a “Año/Cero” : “Fue estremecedor, me dirigía al edificio de presidencia cuando en el entorno, muy cerquita de mi pude oír claramente como alguien estaba llorando...pero allí no había nadie...eran unos quejidos y llantos lastimeros...raros...,me impresionaron mucho”: Nunca se supo de donde provenían aquellos “llantos de ultratumba”, que actualmente se siguen escuchando.
Pero los sucesos no se limitarían a extraños lloros y lamentos... V. L .G. bajaba una tarde del mes de Febrero hacía los garajes de la zona de presidencia en el antiguo patio de cocheras cuando le asaltó un grito desolador, bajó apresuradamente las escaleras buscando la persona que estaba dolorida pero no halló a nadie, oía esos lamentos pero no veía a nadie... Ya en el garaje notó una extraña e incómoda presencia, como si alguien lo estuviera siguiendo, la situación se hizo casi insostenible: “No se lo que ocurría ,algo me cogía del hombro y me era muy difícil soltarme pero allí no había nadie...fue algo increíble...” Una entidad invisible mora por los garajes de la Diputación sevillana asustando e inquietando a los ya asustados trabajadores, no sería el único caso...
Los sucesos se comenzaron a conocer dentro de Diputación y todo el personal es consciente de que algo misterioso está sucediendo en su lugar de trabajo pero no saben el origen de tan extrañas experiencias. El cuerpo de seguridad del edificio también ha tenido sus experiencias, en el mes de Marzo se recibió la señal de uno de los ascensores que suben a presidencia, ascensores que son de uso exclusivo y que sólo atienden llamadas vía llave exclusiva de uso. Aquella fría noche el ascensor no dejaba de subir y bajar accionado por una mano invisible que parecía jugar con el cuerpo de seguridad. Una vez en el lugar sólo se pudo constatar de que el ascensor estaba siendo llamado por un mano y llave invisible que aquella noche se entretenía con el ascensor de la zona noble del edificio. En otra ocasión a uno de los efectivos de seguridad algo invisible y con mucha fuerza le agarró la mano cuando se disponía a solicitar al ascensor en la planta, algo que no quería que aquel ascensor acudiera a la llamada de seguridad mientras se prolongaba aquel extraño rito de subidas y bajadas de mismo sin ser solicitado por nadie...
Los sucesos y experiencias continúan y R. G. D. en el pasado mes de Abril tuvo un extraño encuentro con unas misteriosas sombras en la zona de la segunda planta de garajes del edificio. “Fue algo terrorífico...me disponía a llevar unas bolsas a los contenedores cuando algo me agarró, intenté tirar de la bolsa pero aquello lo mantenía firmemente pegado al suelo pese a que no llevaba nada de peso en él, no podía mover la bolsa...me puse muy nerviosa por que sentí unos pasos pero sin embrago no veía a nadie ni nada que los provocara... cuando solté la bolsa decidida a ir para otro lugar o simplemente salir de allí pude ver una sombra que se alejaba de donde estaba la bolsa, no tenía forma concreta, sólo era una sombra... Allí están pasando cosas raras, y la verdad es que no debe de ser de este mundo”. Nuestra testigo no pudo seguir contándonos más, la emoción se lo impidió.
I.F.C. relata a “Año/Cero” como cierta noche del mes de Abril: “ oí un ruido en la segunda planta y me dirigí hacía allí, al llegar no había nada ni nadie, pero el ruido persistía de dentro de los entornos de trabajo, al llegar al lugar que generaba el ruido me quedé atónito...la fotocopiadora había comenzado a funcionar sola...aquella ala estaba vacía”.
No son infrecuentes en los diferentes miembros de seguridad, limpieza y archivo del edificio de la Diputación de Sevilla el escuchar extrañas voces, sentir presencias, ser acompañados de ruidos y golpes, apagar y encender de luces e incluso la visión de extrañas sombras que vagan por el edificio. Si bien hay que indicar que la zona más afectada por los sucesos paranormales de la Diputación de Sevilla las encontramos en la segunda planta de garajes de la zona del patio de cochera que tiene como techo el edificio nuevo de presidencia.
En uno de los pasillos laterales de la segunda planta de garajes tenemos otro foco de extraños ruidos, en ese pasillo no es infrecuente el poder oír el murmullo de un sin fin de personas que hablan ahogadamente...: “es un sonido extraño, como si hubieran muchas personas hablando en voz baja de cuyas conversaciones se oyen fragmentos deslabazados... unas voces que no son provocadas por nadie ya que esa zona está aislada de ruidos y sonidos y los que le llegan son mínimos...¿de donde provenían aquellas voces?” Nadie lo sabe pero una cosa si tiene clara el personal: allí hay algo o alguien que emite esos ruidos y que no es de esta vida...” Concluyente el relato de este otro testigo.
Las sorpresas no terminan y justo sobre las diferentes tomas de alcantarillado de la planta muchas personas tienen extrañas sensaciones y presentimientos...¿tal vez están relacionados los sucesos? Puede...
Durante las obras de acondicionamiento del edificio en su paso de cuartel de Ingenieros (e Intendencia) al edificio administrativo de Diputación durante el año 1993, se proyectan nuevas edificaciones que obligan a remover las tierras del patio trasero del edificio, allí, en el patio de cochera y a unos seis metros de profundidad se encontró toda una necrópolis de la Edad Media, cientos de cuerpos pertenecientes a una necrópolis que motivó la edición por parte de Diputación del libro “De la Muerte en Sefarad” , trabajo coordinado por la Sra. Dª. María Isabel Santana. Las obras arquitectónicas fueron encargadas a los arquitectos D. Antonio Ortiz y D. Antonio Cruz siendo finalizadas en el año 1994 centralizándose entonces todos los servicios en la nueva sede de Diputación en Sevilla ,que curiosamente estuvo a punto de ser trasladada al no menos conocido -y dominado por la presencia del fantasma de Sor Úrsula- del edificio del Hospital de las Cinco Llagas ,hoy sede del Parlamento Andaluz.
En un principio encontraron varios enterramientos diseminados, este hecho atrajo el morbo popular que de boca en boca arremetió contra varios de los barrios circundantes: la Puerta de la Carne, San Bernardo, el propio barrio de Santa Cruz y zona del Prado de San Sebastián, engrandecieron los resultados de los cadáveres encontrados. Con el transcurso de las excavaciones arqueológicas ,lo que en un principio algunos expertos determinaron como posibles fusilamientos de la guerra del 36, aumentó considerablemente llegando a tomar tintes dramáticos al desbordarse el número de cadáveres encontrados, se llegó a catalogar ese descubrimiento como “necrópolis romana”, que había seguido siendo utilizada por el colectivo Sefardí de la zona de la judería del barrio de Santa Cruz como su propio cementerio de la época... Así pues y con absoluta certeza se puede decir que el edificio de la Diputación de Sevilla fue construido sobre un cementerio donde encontraron descanso cientos de almas fallecidas en siglos pasados...
Los servicios administrativos fueron designados a ocupar el edificio del antiguo cuartel siendo ahora el denominado como A. El edificio B sería el nuevo de construcción en el mismo patio y el C era y es un edificio político que acoge la sala de plenos y despachos políticos así como la Presidencia.
Los restos humanos se desalojaron de la necrópolis hallada y se despojó a los muertos de su último lugar de descanso...para construir un edificio...
Hoy y tras nuestra investigación en el lugar y repetidas visitas al mismo podemos dar constancia del pleno conocimiento que tienen sus empleados de los extraños sucesos que allí se vienen produciendo, siendo un secreto conocido por todos pero de dura represión administrativa a quién ose divulgar los acontecimientos vividos allí. El descubrimiento y traslado de la necrópolis del lugar nos da un dato curioso: los restos fueron hallados en el patio trasero a varios metros de profundidad (ente cuatro y seis metros) y es precisamente en esa zona donde más intensos son lo fenómenos ,y curiosamente es a esa profundidad donde hallamos la segunda planta de garajes donde hemos relatado diferente hechos y donde se recrudecen los fenómenos, las voces, las presencias... En esta zona otros afirman tener extrañas sensaciones sobre las bocas de desagüe e incluso escuchar inquietantes susurros..., bocas que se sitúan sobre al antiguo cauce del río Tagarete y que tan en contacto estuvo con esos enterrados bajo el hoy nuevo edificio de Diputación...¿podría existir una relación? Es más que probable.
El último dato que viene a sembrar de inquietud estos extraños sucesos fue la presencia de en el lugar de los miembros de “FlashBack” (Ricardo Bru y su equipo de hipnosensibles) . En el patio, las sensitivas dijeron presentir una presencia de un niño que lloraba y buscaba a su madre...era la hipótesis de las hipnosensibles, tras pasar allí varias horas y hacer las grabaciones para el exitoso programa de Canal Sur abandonaron el lugar. La sorpresa llega cuando la emisión del mismo aún no se ha producido y voces autorizadas de la misma Diputación afirman que ha sido “vetado” hasta ,al menos, que hayan pasado las elecciones a la alcaldía sevillana...
***Nota: Los nombre bajo siglas expuestos es el presente artículo están alterados intencionadamente debido a las serias advertencias a las que han sido sometidos los empleados del edificio por parte de sus superiores si la información traspasaba los muros de la Diputación.
Ha sido la revista «Año Cero» -que ya se chivó de que en la sede del Parlamento Andaluz, antiguo Hospital de las Cinco Llagas, había ectoplasmas llorones- la que ha revelado la existencia de estos nuevos espectros que, al parecer, son viejos conocidos de los ocupantes del edificio de la Puerta de la Carne. También lloran y claman estos fantasmas, producen sus fenómenos poltergeists en los ascensores, que suben y bajan sin concurso humano, y se dejan ver recorriendo los rincones de la Casa, «aterrorizando» o por lo menos inquietando a los sufridos empleados.
Según parece, había una prohibición tácita en algunos casos y efectivamente verbalizada en otros para que el asunto no saliera de las paredes del «Ayuntamiento de los ayuntamientos», so pena de padecer grandes y terribles males y sufrir no menos tremendas venganzas. Represalias, como sanciones administrativas, que en cualquier caso no perpetrarían los espíritus translúcidos sino vulgares seres vivitos y coleando. Tal era el veto que ni la oposición, empecinada siempre en hurgar en los crípticos designios del Gobierno mandante, ni se había enterado.
Sin palabras, y eso sin contar con la equivocación que supone ocultar que un espectro merodea por tan señero edificio cuando de todos es sabido el interés turístico que provocan fenómenos de este calibre. Seguramente, en este caso, todos los sectores implicados en la promoción turística del terruño se mostrarían francamente de acuerdo en vender que la Diputación posee un doméstico espíritu del más allá que, como la Zarzamora, va llora que llora por los rincones desde hace casi una década.
El caso es que alguien se ha ido de la lengua y ha contado a la revista, seguramente con los pelos como escarpias, que hay quejidos y sollozos lastimeros, la visión de una «presencia con forma de sombra». También en el programa radiofónico Milenio 3 un guardajurado y señoras de la limpieza de la Corporación narraron los sucesos relatando las visiones de una forma alta y blanca, del llanto de un niño, de una sombra negra que oscilaba, y de la autonomía de los ascensores en el edificio de Presidencia.
La sede de la Diputación se ubica desde principios de los años noventa en el antiguo Cuartel de Intendencia, inmueble que adquirió la Corporación Provincial al Ministerio de Defensa y que, tras obras de adaptación, ocupó en 1994.
Pero el conocido como Cuartel de la Puerta de la Carne, que fue construido en el siglo XVIII, se asienta sobre un cementerio medieval judío que previamente fue necrópolis romana. Además, tal y como recoge la historia, no debe olvidarse que en 1391 tuvo lugar la conocida como matanza de la judería sevillana. En aquella época, el barrio judío sólo tenía dos accesos, Mateos Gago y la Puerta de la Carne, por los que la muchedumbre, azuzada por el arcediano de Écija, Ferran Martínez, degolló a hombres, mujeres y niños hebreos. De tan terrible manera perecieron cuatro mil criaturas, según recoge un documento publicado en la web de la Asociación Sevilla Sefarad.
Huesos viejos y mucha sangre -«hasta los tobillos llegaba», dicen los cronistas- se hallan pues bajo los pies de los cientos de políticos y trabajadores de la Diputación que asisten en un obligado silencio al supuesto hecho paranormal que se produce con mayor intensidad en la segunda planta de aparcamientos del área del patio de cocheras, (que está bajo el edificio de Presidencia, también territorio de solaz ectoplásmico), precisamente donde durante las obras de remodelación del edificio se encontró, a unos seis u ocho metros de profundidad, el enterramiento de centenares de restos humanos.
También según la revista, el inefable programa de Canal Sur «Flashblack», estuvo antes de la celebración de las elecciones municipales en el patio de los quebrantos, donde algunos mediums sintieron la presencia de un niño que lloraba y buscaba a su madre. Pero, desde las altas instancias se impidió la emisión del programa.
Mientras algunos escépticos ríen, en los recovecos de la Diputación se esconde algún alma en pena. Sus cuitas pueden devenir de un sufrimiento de siglos o pueden ser agravios modernos (algún asesor defenestrado, algún vicepresidente ignorado, algún ex diputado desechado, algún impenitente aspirante a cargo, algún ex alcalde vengativo que se quedó sin subvención europea...), que por algún fenómeno extraño, que han acabado inmaterializándose y manifestándose ectoplásmicamente en algún rincón para sollozar y clamar sus penas y quebrantos, y de paso, quizá, asustar a las sordas autoridades.
Hemos intentado ponernos en contacto con ese o esos seres incorpóreos de la Diputación, o con sus representantes, para que aclaren y den su versión de los hechos, pero al cierre de esta edición, todas las tentativas han sido infructuosas
- FIN -
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