En el sevillano barrio del Parque Alcosa,existía no hace mucho el canal del Tamarguillo,el cual servía de regadío de cultivos y precisamente en dicho barrio estaba la compuerta de dicho canal (por cierto, hecho por presos de esa época, por lo que se le llama "canal de los presos").
La persona que se encargaba de abrir y cerrar la compuerta,un señor de avanzada edad,vivía en una casa construida al lado de la compuerta,junto a la única compañía de un perro mastín español.Sobre la muerte del anciano hubieron varias hipótesis,entre ellas,la primera era que el anciano murió de muerte natural y el perro hambriento,devoró el cadáver (para mi es una cosa improbable,porque los perros suelen ser muy fieles a sus amos aún después de muertos,pero claro,al hambre no hay pan duro...).
La segunda es, que el anciano,triste por la pérdida de su esposa,decide emparedarse en aquella casa,tapiando puertas y ventanas y al igual que la anterior versión,su cuerpo fué parcialmente devorado por su mascota.
Pasados unos años,un suceso extraño ocurre cerca de la casa.Una anciana se aparece a escasos 20 m de donde se sitúa aquella casa. ¿Tendrá esto alguna conexión o quizá es el fantasma de la difunta esposa del anciano ? quién lo sabe,algunos dicen que es una leyenda,pero tras las leyendas siempre hay la raiz de una verdad oculta.
Fuente :http://www.javierlobato.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario